Pueden tener diferentes formas y tamaños, y pueden ser fijas o abatibles para permitir la ventilación. Están fabricadas con materiales transparentes o translúcidos, como vidrio, policarbonato o acrílico, que permiten el paso de la luz al tiempo que proporcionan aislamiento térmico y protección contra los elementos.
Las claraboyas se utilizan en una amplia gama de edificios, como viviendas, oficinas, fábricas, centros comerciales y espacios públicos, donde se busca aprovechar la luz natural y mejorar la calidad de los espacios interiores. Su instalación debe ser realizada por nuestros profesionales especializados para garantizar un montaje adecuado y asegurar una buena eficiencia energética y estanqueidad.